¿Qué es la Geotermia de Baja Entalpía y cómo funciona?
La geotermia de baja entalpía es una forma de obtener energía renovable a partir del calor natural del interior de la Tierra. A diferencia de la de alta entalpía, que se utiliza para generar electricidad a partir del vapor de agua a altas temperaturas y presiones, se utiliza principalmente para calefacción y agua caliente en edificios.
Es una forma de energía renovable muy interesante que presenta múltiples ventajas tanto económicas como ambientales. A medida que se desarrollen nuevas tecnologías y se reduzcan los gastos de instalación, es probable que se convierta en una opción cada vez más popular para la climatización en edificios.
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¿Qué elementos se necesitan?
El proceso de obtención de energía geotérmica de baja entalpía es sencillo. Se trata de extraer el calor acumulado en el subsuelo mediante un circuito de captación de agua y una bomba de calor.
Por ejemplo, las empresas de Geotermia Madrid realizan la instalación de tuberías de polietileno enterradas bajo tierra a la profundidad adecuada. Esto permite que el agua que circule a través de estas adquiera la temperatura de la zona. Esta agua es empujada y movida gracias a una bomba hidráulica conectada a la red eléctrica para que pueda recorrer todo el circuito y cumplir su objetivo.
La bomba de calor es el elemento eléctrico de muy bajo consumo indispensable para que se efectúe el intercambio de temperatura con el suelo y el agua y así poder utilizarla como energía renovable. Es un dispositivo muy similar a las bombas de los aparatos de aire acondicionado o de los frigoríficos.
En el caso de la bomba de calor geotérmica, es capaz de generar calor o frío, según las necesidades. Recuerda que la temperatura media del terreno en España varía entre los 16ºC y los 22ºC. Estas representan las condiciones ideales para que este aparato cumpla su función.
Técnicamente, una bomba de este tipo utiliza el ciclo frigorífico de un refrigerante en cuestión para que, mediante un circuito cerrado (el de captación) pueda absorber el calor de un foco (el agua ya caliente por la tierra) y cederlo a ese foco frío. Este proceso se puede invertir para climatizar también durante el verano.
Finalmente, una vez obtenido el calor del subsuelo, el siguiente paso es distribuirlo por toda la vivienda o edificio. Para eso, se debe elegir el sistema de climatización más adecuado. Este equipo se encargará de proyectar la temperatura requerida en la estancia. Puede ser mediante conductos de aire o fan-coils, circuitos de agua y radiadores o mediante paredes, techos o suelos radiantes.
Ventajas de la Geotermia de Baja Entalpía
La geotermia de baja entalpía presenta múltiples ventajas que la hacen una fuente de energía renovable muy interesante:
- Bajo impacto ambiental: Al no emitir gases contaminantes ni generar residuos, es una forma de energía muy limpia y respetuosa con el medio ambiente.
- Ahorro energético: La geotermia de baja entalpía aprovecha el calor natural del subsuelo, por lo que se reduce considerablemente el consumo energético de los edificios.
- Ahorro económico: A pesar de que la instalación inicial puede tener un precio elevado, a largo plazo se obtiene un importante ahorro en la factura.
Además de las ventajas mencionadas, la geotermia de baja entalpía también presenta otras características que la hacen una opción cada vez más interesante en la industria de la climatización.
Por ejemplo, la energía geotérmica es muy estable, ya que la temperatura del suelo se mantiene prácticamente constante durante todo el año. Esto significa que el sistema de climatización no está sujeto a las fluctuaciones de temperatura externas y funciona de manera más eficiente y constante que otros sistemas.
Además, la geotermia de baja entalpía no requiere de grandes espacios para su instalación, lo que la hace especialmente adecuada para edificios urbanos donde el espacio es limitado.
